Emre Can, uno de tantos alemanes.

Can, futuro ingeniero de la Maanschaft

Emre Can, es un joven futbolista alemán nacido en 1994 perteneciente a la hornada de centrocampistas germanos. Este país es conocido en el mundo del fútbol por su prolífica cantera en esta demarcación en los últimos 10 años, desde que debutó Michael Ballack con el Bayer Leverkusen, pasando por Schweinsteiger, Özil, Sahin, Götze, Marko Marin, Muller... de los que os hablaré en futuras entradas.

Al igual que muchos de estos últimos futbolistas nombrados, es de origen turco, debido al gran número de emigrantes turcos que llegaron a Alemania en los años 60. La fama le llegó tras la disputa del Mundial sub-17 de México, en el que, a pesar de no ganar, dejó el sabor de ser el mejor equipo en su categoría en todo el planeta.

Fue clave en el centro del campo, puso orden a toda la línea medular alemana. Es un portento físico, derrocha virtudes en este aspecto, lo que le permite ser un gran baluarte defensivo, aunque eso no quita para que sepa sacar bien el balón, mimarlo, cuidarlo y tener una gran visión de juego. Cuando juega un buen partido, parece que su equipo juega con un hombre más.

Emre Can, disputando el Mundial sub-17 de México

A pesar de sólo anotar un gol durante todo el Mundial juvenil, en la final contra México, que posteriormente acabarían perdiendo, demostró ser una de las mejores y más firmes promesas del fútbol bávaro. A nivel de clubes, actualmente milita en las categorías inferiores del Bayern Múnich, pero fue fichado cuando tan sólo contaba con unos pocos años de edad procedente del Eintracht Frankfurt.

Apenas faltan dos o tres años para ver a este prodigio de jugador disputando partidos en los escenarios más emblemáticos del mundo del fútbol. Aquí os dejo un vídeo con algunos de sus mejores regates.

Primera foto: subida por la página UEFA

Segunda foto: subida por mí, sacada de un juego.